miércoles, 5 de febrero de 2014

Descubriendo el Vudú



Buff!! Entre una entrada y otra pasó bastante tiempo, pero aquí estoy otra vez. Y hoy toca hablar del vudú, y le dedico la entrada a AHS: Coven, en específico a Marie Laveau, máximo exponente de esta religión en la serie, y que existió de verdad, siendo proclamada «Reina del Vudú en Nueva Orleáns» en 1830, manteniendo el título hasta que murió (1835 o 1881, esto no está muy claro).



Ya conocemos a alguien que practicó vudú, pero.... ¿qué es el vudú?.

Pues el vudú es una religión que surgió en lo más profundo del África negra, hace la tira de años (6000 más o menos), y que fue llevada a América con los esclavos. Ahora bien, la mayoría (o por lo menos yo), creemos que el vudú sólo es torturar a un muñeco para que su dolor se refleje en una determinada persona. Aunque en América se vió influenciado por religiones locales más la católica.
Este es típico de los que se llevan mal con su jefe.

Pero no, el vudú es mucho más, originalmente su finalidad era la de sanar (¿acupuntura telequinésica?), y se basa más en buscar una sabiduría a través de un nivel superior de conciencia. Y de ella derivan muchas de las santerías (las del Caribe Caribe, por ejemplo). Y consideran que hay una entidad sobrenatural última, llamada de diversas maneras, siendo las más habituales Bondye, término derivado del francés bon Dieu (buen Dios) o Mawu (en ocasiones se hace referencia a una pareja, Mawu y Lisá), regente del mundo sobrenatural, pero ésta es inaccesible y permanece ajena al mundo de los humanos, por lo que la comunicación con ese mundo sobrenatural ha de llevarse a cabo a través de los numerosos loas (el Barón Samedi, la Maman Brigitte,Damballa, etc), entidades también sobrenaturales que actúan como deidades intermediarias y que conforman de hecho el eje central del vudú, teniendo cada uno de ellos una personalidad diferente y múltiples modos de ser alabados (por canciones, bailes, símbolos rituales y otros). Si bien no existe una estructura religiosa homogénea, un sacerdote vudú tiene la función de ponerse en contacto con los loas invocados, hablando el loa a través de él, por lo que se atribuye a los sacerdotes un gran poder, y recibe genéricamente el nombre de houngan, o si se trata de una mujer, mambo, (¿os acordáis de Marie?); y usaban su magia para el amor, curar, fertilidad, maldiciones, etc. Pero con el paso del tiempo se fue asociando con la magia negra, llegando incluso a asociarse con la creación de zombis.

Walli es un zombi, por eso nadie le encuentra.


Ahora bien, ¿Cómo hacer un muñeco vudú?

Primero los materiales: 

  1. Tela, madera o cera (con lo que vallan a construir el muñeco) 
  2. Un objeto personal de la víctima (puede ser un anillo, cabellos, lo que sea) 
  3. Hilo y agujas de coser (si lo hacen de tela lo deberán coser) 
  4. Agujas, alfileres (cuando finalmente tengan el muñeco armado les servirá para torturarlo) 
  5. Botones, lana (si quieren darle detalles, como los ojos, el pelo, las manos del muñeco, etc.) 
  6. Relleno (si es de tela deberán rellenarlo con algo, puede ser papel, goma espuma, lo que tengan cerca) 


Segundo, un consejo: 

  1. Siempre se debe tener una mente y pensamientos negativos hacia nuestra víctima mientras se construye el muñeco, y mientras lo torturamos... 


Tercero, a armar el muñeco


  • Podéis darle la forma que queráis al muñeco, recordar que antes de rellenarlo por completo debeis dejar un espacio para colocar el objeto personal de la víctima, y después de eso podreis coserlo... Ya que sin el objeto no serviría para nada... Luego  le dais los detalles que quirais... 


Cuarto, la mejor parte: 

  1. Finalmente podremos usar las agujas (si nos cae muy mal esa persona directamente lo tiramos al fuego) y hacer maldades
  2. O, si en vez de pensar en cosas malas, pensamos en cosas buenas, podemos hacer magia blanca y usar el muñeco para curar males, por ejemplo. Seguro que esto lo agradecen más.
  3. Y personalizar el muñeco, añadiendole el pelo, cicatrices, etc; siempre ayuda (cuanto más se parezca el muñeco y la persona mejor)

Y esto es todo, otro día más.






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